Setas Congeladas
Hace algún tiempo, la cocina de las setas y trufas resultaba ser desconocida en nuestro país, limitándose al consumo de muy pocas especies con recetas tradicionales. Las setas son una verdadera joya de la gastronomía, sin embargo, pueden tener una vida útil muy escasa. Como el buen manjar que son, su temporada es corta y son muy delicadas. Por fortuna, podemos recurrir a las setas deshidratadas o setas congeladas a lo largo del año, que pueden ser bien aprovechadas si sabemos usarlas.
Existe una infinidad de setas que aportan a nuestra cocina un toque exquisito. Hay variedades que tienen tanto sabor que pueden sustituir ingredientes tan imprescindibles y tradicionales como la sal en la preparación de alimentos. Algunas de ellas son más apreciadas y consumidas en nuestro país, según la temporada de recogida. Por ejemplo, en primavera, las setas de cardo y colmenillas son más apetecidas. Mientras que, en otoño, son más comunes el boletus, el níscalo o la trompeta de la muerte.
Una de las setas más populares y consumidas en el ámbito gastronómico es el boletus. Suele aparecer desde finales de verano hasta finales de otoño, después de abundantes lluvias ya que requiere de suelos húmedos para crecer. Esto explica por qué tienen un porcentaje de agua tan alto (alrededor del 90% de su peso). Los demás nutrientes que las componen se dividen entre proteínas e hidratos de carbono. Esto hace que el boletus sea un alimento idóneo para dietas hipocalóricas ya que no contiene grasas y ayuda al buen funcionamiento del tránsito intestinal. Según esto, no suena muy descabellada la idea de tener una reserva de boletus congelados en casa. ¡Te caerán bien en cualquier momento!
El boletus la reina de las Setas
Para nosotros, el boletus es la reina de las setas. Por su textura delicada, sabor exquisito y múltiples beneficios, es una de las preferidas. La textura de su carne y su sabor suave, la ha hecho bastante popular en el ámbito gastronómico. Son excelentes en sopas, risottos, quiche lorraine, pastas rellenas, croquetas. También para acompañar platos de aves y caza, pescados y mariscos o incluso, para aderezar salsas o como guarnición. Dependiendo de la receta que tengas en mente, te convendrá conseguir boletus entero, boletus troceado o boletus con láminas.
Lo más importante de todo, es que tengas en mente que las setas son un producto delicado. Incluso, si es una seta congelada. En ocasiones, un boletus edulis congelado puede variar en sabor, si no se conserva y utiliza correctamente. Por lo general, las setas pueden ser congeladas una vez se han limpiado, sin embargo, debes tener cuidado para que la textura no varíe una vez las descongeles y queden demasiado blandas.
Tienes muchas opciones para incorporar las setas en tus recetas diarias y conservarlas correctamente en tu cocina. Como ves, no es un ingrediente difícil de utilizar, ni exclusivo para restaurantes importantes. Las puedes congelar, envasar en diferentes conservas, deshidratar o desecar. Las setas deshidratadas, por ejemplo, aguantan mucho tiempo en la despensa si se conservan bien. ¡Tú eliges!
Comprar setas congeladas
El boletus es la reina de las setas por su sabor exquisito y por su textura delicada. Disponemos todo el año de boletus congelado en varios formatos: boletus entero, boletus en láminas y boletus trocedado.